Para HEY!..
Es el nombre del pedrusco que nos viene derecho a la Tierra, por si quieren conocerlo. Dicen que mide unos 90 metros y es del tamaño de un edificio de mediana estructura, que el Sistema de Alerta de la NASA captó hace algún tiempo, y cuya trayectoria y velocidad está empezando a preocupar. Su tamaño, comparado con nuestro planeta, no parece gran cosa, pero el impacto, dicen los expertos, sería mortífero… El último parecido cayó hace 65 millones de años y acabó con los dinosaurios de entonces; y éste puede terminar con los de ahora, o sea: nosotros. De ahí que los de la Agencia Espacial anden tonteando y tanteando a la vez, esto es: un comunicado que diga que puede que nos toque la “pedrea” lotera; otro que afirme que su trayectoria aún puede variar y que no pase nada; después otro asegurando que nos puede joder la siesta; luego otro que a lo mejor solo nos roza…
La cuestión es que los que llevan el caso y vigilancia, coinciden en que tenemos un margen de siete años antes de la visita, y que eso nos da tiempo para estudiar la posibilidad de desviarlo enviándole un misilazo que lo saque de su órbita, o cualquier solución de las que ya nos ha dado Hollywood en sus películas, con un presidente americano en el despacho oval salvando el mundo y Clint Eastwood cabalgando el cohete liberador desde una sonda espacial especial.
Lo que mucha gente no sabe es que mi amigo J.J. Benítez, el autor de los Caballos de Troya, muchos años antes que los de la Nasa lo descubrieran, ya publicaba en sus libros que, sobre esas mismas fechas, la humanidad iba a sufrir un cataclismo cósmico por pedrada en las muelas de mucho cuidado, a consecuencia del cual se iba a hacer una limpieza desparasitaria de narices, ya me entienden ustedes… Esta coincidencia no la he leído en ninguna de las crónicas, artículos o columnas que ya se vienen publicando, cada vez con mayor frecuencia, del también cada vez más cercano amigo 2024YR4, el cual, por cierto, y porque viene a cuento, en profecías de la más cercana antigüedad ya se le ponía nombre: Ajenjo.
Pero es el caso que nuestro mundo ya tiene otras amenazas más urgentes, a mi parecer, de las que ocuparse y preocuparse, y es la invasión de los Trolls maléficos que se lo quieren repartir con toda la insanía, maldad e impunidad de su fuerza: Trump y su corte, Putin, Netanyahu y otros demonios menores sueltos y a su servicio… O sea, que nuestro planeta sufre una doble amenaza: una interna y otra externa, galáctica, que nos apunta como un apocalipsis sanjuanero a punto de eclosionar… En estos casos, un cataclismo puede acabar con otro cataclismo, y dejar el solar hecho un bancal para una nueva siembra, ya saben, igual que las maldiciones bíblicas: limpiar para volver a empezar.
A mí, personalmente, me preocupa más el gobierno de los gorilas y los demonios que el posterior piñazo. Y si en estos siete años van a destruir la justicia, la democracia, las libertades y los derechos humanos, pues que el pedrisco nos dé por saco a todos, aunque luego venga Charlton Heston a maldecirnos por habernos destruido entre todos los que componemos este zoo… Total, para lo que me resta que estar en aqueste convento, ya saben vuesas mercedes lo que sigue, por escatológico que suene. Tampoco tengo el menor interés en asistir al espectáculo, no vayan a creer ustedes…
Mas no puedo dejar de relacionar lo del anunciado cantazo con nuestra ínclita Diaz Ayuso of Spain, por poner un ejemplo práctico, cuando no hace mucho dijo alto, claro y sin sonrojo alguno, sobre el intento de aclarar la muerte masiva en las residencias de mayores madrileñas cuando la pandemia del Cóvid, declarando que “eso es hablar de mierdas”… La misma política que antes justificó esa burrada de negarles auxilio médico y humano “porque, antes o después, iban a morir de todas maneras”… La misma indisimulada elementa que bebe los vientos y hace méritos por gobernar España entera (Trump market) y no solo la comunidad del oso y el madroño que la vota como buen pelota.
Y lo relaciono, porque tampoco puedo evitar pensar que haría lo posible por juntarnos a todo mayor y/o enemigo político suyo en el punto exacto de colisión de don 2024YR4 y quitarnos a todos de en medio de una bien medida tacada. Una “Solución Final” al mejor estilo del maestro Hitler… No dejo de preguntarme si los jubilados madrileños, familiares y allegados, saben que votan a un führer, o no… Es que no encajo las protestas con los resultados en urna. No me salen las cuentas. No coinciden ni rompiéndole las piernas al santo para que entre el Paso… o trote al paso.
Sea como fuere la cosa, tampoco sería de extrañar que los nuevos sheriff´s del nuevo orden mundial hagan exactamente lo propio con toda la gente que les sobra y les molesta… El pedruscón se basta y se sobra para limpiar el planeta de inmigrantes de toda laya y condición, incluidos palestinos, gazatíes y/o cuántos estorben en el nuevo nazismo… Al fin y al cabo, Trump y 2024YR4 son de la misma, idéntica, naturaleza destructiva, y los análogos se asocian para conseguir sus fines y propósitos comunes (miren la nueva pareja de baile Trump y Putin, convertidos en los flamantes Fred Astaire y Ginger Rogers).
Es posible que ambos fenómenos – el político y el astronómico – formen parte de la misma ecuación… Puede que el primero venga a preparar al orbe para el segundo; o que se complementen, o no. Pero guardan ambos dos una siniestra semejanza, más o menos apocalíptica… Lo cierto, de momento al menos, es que los científicos, los de las agencias espaciales, Nasa, etc. nos van preparando el cuerpo y soltando el caso de la cosa en estudiados boletines, programas y noticiarios; y los genífaros políticos guardan un silencio sepulcral y sospechoso a tal respecto. Lo real es que la posibilidad existe, sobradamente además, aunque los índices de probabilidades varíen según “conocencia” y conveniencia… Imagino que el tiempo nos irá acercando al final de la película, que, a lo mejor, o a lo peor, es el principio de otra…
MIGUEL GALINDO SÁNCHEZ / info@escriburgo.com / www.escriburgo.com
