BULOS Y CONTAGIOS

Hay periodistas que avalan la decisión tomada en marzo por Twiter, desde suspender temporalmente sus cuentas, hasta ser expulsados de la red social, a todos aquellos usuarios que difundan falsedades sobre las vacunas. Yo también aplaudo tal decisión… de momento. Al fin y al cabo es un espaldarazo a todos los implicados en la lucha por conseguir aumentar el número de inmunizados y reducir el número de muertos, y que acabemos cuanto antes por dominar a la pandemia y no que la pandemia nos domine a nosotros, como hasta ahora está pasando… Y eso es loable…

Pero no se me despista que no es labor de las plataformas el tomar decisiones en tal sentido, y actuar, de buen censor en este caso, para evitar mayores males. Aún en su buena intención, no es su cometido, y solo se explicaría de manera circunstancial y puntual su tal actuación… Solo en circunstancias excepcionales se deben tomar medidas excepcionales. De hecho, los negacionistas más mediáticos y faranduleros, incluso los del espectro político (son más fantasmas que espectros) podrían acusar a estas empresas de violación del derecho de expresión y/o de opinión.

Esto, en realidad, pone el dedo en la llaga, una vez más, sobre los límites de las libertades y de los derechos… Los defensores de las mordazas y censuras no deben justificarlas, salvo en extremos que, como el presente, no exista otra opción, y solo hasta que los motivos de tal excepcionalidad persistan… Y los defensores de la libertad, debemos de entender que tampoco todo vale. Entiendo que ese equilibrio tan solo se puede lograr en ciudadanías cultas y educadas, formadas, con políticos responsables y cuidadosos… Y fíjense bien que estoy diciendo una absoluta perogrullada, puesto que solo un pueblo culto y educado puede elegir a políticos responsables y honrados. Ciudadanos electores y ciudadanos elegidos están unidos por un cordón umbilical que los relaciona y los justifica ambivalentemente… Tal que así el estanque, tal que así los peces.

De ahí que, un ciudadanaje bien formado siempre estará bien informado, y no necesita de leyes coactivas de ningún tipo, ni paternalismos protectores, ni que ninguna empresa de ninguna red emplee mecanismos censores, ya que la gente se supone que se basta a sí mismas para saber diferenciar la verdad del bulo y del arte cachirulo… Pero, claro, el gran problema es cuando esta verdad del barquero parece convertirse en utopía más que en realidad, porque la sociedad nos encontramos cada vez más alejada de tal hecho… Y no solo eso, si no que nos convertimos con fruición en parte activa de la cadena de propalación de tales embustes y bulos…

Si necesitamos de tales diques protectores es porque somos presas fáciles de mentiras y falsedades, o porque convienen a viles y ruines intereses asociados a los nuestros, y entonces, al mismo tiempo, también se nos secuestran nuestras propias libertades de opción y opinión, por lo que nos convertimos en verdugos y víctimas a la vez… Claro que, bien pensado, si no sabemos hacer uso de nuestra libertad, ¿para qué puñeta la queremos?.. Esa misma es justo la excusa que utilizó Franco, por ejemplo, para dar su golpe de estado y “salvar” a los españoles de sí mismos durante cuarenta años…

Ya digo… difícil dilema. Sales a la calle, hablas con la gente, en la cola del supermercado o en la cola de la vacunación, da igual, y compruebas que muchas de esas personas han rendido su opinión a los bulos de las redes, que se propagan como el propio virus cóvid por los vecindarios. Ya no son ellos, son Fake News andantes, zombies, portadores cerebrales de otro virus mental que repiten convencidos propagando la infección… “Se lo he oído decir al Bosé, oye…”, o “es que lo ha dicho la Victoria Abril, que no es tonta.”, e incluso “…joer, si lo dice hasta la consejera de educación y cultura, ¡si lo sabrá ella!..”, “lo he leído en Feisbu, ¿estamos?..”. Y me planteo lo que está bien o mal en cuestión de medidas… Unas se justifican con las otras en una retroalimentación, y yo ya no sé… Ser o no ser, hit ist the question, acho…

/ https://miguel2448.wixsite.com/escriburgo / viernes 10,30 http://www.radiotorrepacheco.es/radioonline.php

Escriburgo

Durante 30 años fue vicepresidente de C.O.E.C.; durante 20 años Juez de paz; durante 15, Director de Caritas... Es autor de cinco libros. - Ha fundado varias ONG's, y actualmente es diplomado en RSC para empresas; patrón de la Fundación Entorno Slow, y Mediador Profesional.

Deja una respuesta